La Cumbre de París (21ª Conferencia de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático) es una oportunidad que tienen que aprovechar los gobiernos del mundo para asumir compromisos vinculantes con la lucha contra el cambio climático. Ban Ki-moon lo dijo muy claro: no hay plan B porque no hay planeta B.
La oficina del Defensor del Pueblo Andaluz, en la jornada organizada recientemente sobre “Ciudades Inteligentes, Ciudades Sostenibles” y ante la evidencia de la incidencia del factor humano en el calentamiento global, reclamó un cambio en el modelo productivo y los hábitos de consumo, una apuesta por la economía circular y una nueva manera de entender las ciudades en clave de sostenibilidad.
Adoptar esta posición supone entender que las respuestas inteligentes a las necesidades de la población implican reconocer el protagonismo que debe tener la sociedad civil a la hora de de decidir el modelo de ciudad, de manera que su desarrollo económico garantice la cohesión social y la sostenibilidad ambiental.
Como se decía en una de las conclusiones de esta Jornada, “lo que define realmente a una ciudad como inteligente es su capacidad de conocer las necesidades de la población y ofrecer respuestas adecuadas y eficientes para atenderlas”. Esto es, también, justamente lo que esperamos de los participantes de la Cumbre de París: una respuesta adecuada y eficiente, es decir inteligente, al reto que plantea el calentamiento global de la Tierra.
2 Comentarios
Lamento que según lo visto, mi ciudad no es nada inteligente. Desprecia tomar medidas ante sus niveles de contaminación y continúa imparable la motorización del centro y los barrios. Curiosamente en almanjayar y Cartuja se da una alta concentración de dióxido de nitrógeno, las partículas se reparten más y el CO2 también existe.
Supongo que el Ayuntamiento de Granada podrá ser cuando menos conminado a tomar alguna decisión al respecto.
Fdo. JGL. Coordinador de Granada al Pedal
PD. Por la aplicación del Pacto Andaluz por la bici
Hola Jesús García, sin lugar a dudas la contaminación atmosférica provocada por algunas substancias con motivo del uso de los vehículos de motor es un importante riesgo para la salud, provocando, al mismo tiempo, cuando se utilizan energías fósiles la emisión de gases que inciden de manera directa en el denominado efecto invernadero. Justamente por ello esta Institución ha tramitado distintas quejas de oficio y instancia de parte con objeto de que se fomente le uso de la bicicleta. En todo caso se trata de un problema de entidad que exige una respuesta de compromiso por parte de los poderes públicos ya que es un problema estructural que demanda un cambio profundo en la forma de entender la movilidad. El año pasado realizamos un Informe Especial que puedes consultar en nuestra web sobre La Accesibilidad, la Seguridad y la Calidad ambiental de las Ciudades Andaluzas que recientemente se ha debatido en Comisión en el Parlamento de Andalucía. En este informe apostamos por ese cambio profundo y necesario en el modelo de movilidad urbano.
Gracias por tu participación. Un saludo.