El Ayuntamiento de Almería inicia los trámites para la contratación de la limpieza del Barranco del Caballar

Se dirigió a nosotros el Presidente de una asociación vecinal de Almería, de la zona de La Chanca y Pescadería, denunciando la situación en la que se encontraba el Barranco Caballar, situado al norte de este barrio, convertido en un vertedero donde se arrojaban toda clase de residuos (adjuntaba fotografías de la zona que mostraban esta situación). Siempre según el interesado, el Barranco está integrado en el casco urbano, de manera que su situación aporta unas condiciones higiénico sanitarias absolutamente desaconsejables para la población de la zona, advirtiendo del riesgo de un posible desbordamiento en caso de lluvia ante un eventual taponamiento del tramo soterrado del cauce a causa de la presencia de este tipo de residuos y basuras.

Explicaba que, en su opinión, las únicas soluciones posibles consistirían en colocar pantallas frente a los contenedores para evitar la caída de bolsas al barranco, si bien ésta sería una solución disuasoria; como solución definitiva proponía soterrar todo el tramo, permitiendo su cauce subterráneo para aguas, pero sin residuos.

Se habían dirigido dirigido en numerosas ocasiones a las administraciones implicadas, Ayuntamiento de Almería y Junta de Andalucía, que, lejos de aportar una solución, no hacían más que responsabilizar a la otra administración de la situación. Así, por ejemplo, la Junta de Andalucía responsabilizaba al Ayuntamiento, que era al que compete la limpieza del barranco por tratarse de acumulación de residuos sólidos urbanos, mientras que el Ayuntamiento entendía que era la Consejería con competencias en medio ambiente la que tenía atribuida esta tarea.

Por último, según las noticias de prensa aportadas por la asociación, parecía que ambas administraciones, en algún momento, habían procedido a la limpieza del Barranco, pero al poco tiempo había vuelto a llenarse de basuras por lo que la asociación demandaba una solución urgente, que fuera definitiva en el tiempo.

Tras admitir a trámite la queja nos dirigimos tanto al Ayuntamiento de Almería como a la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible.

Ésta última nos informó que el Barranco del Caballar está situado en suelo urbano y que el origen de los vertidos estaba directamente vinculado con la localización de los contenedores municipales de residuos, junto al encauzado del barranco. La sentencia 1962/2017, de 13 de diciembre, de la Sección Cuarta de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo estableció en su fallo que en zonas materialmente urbanas de pueblos y ciudades, la administración competente para la limpieza y drenaje ordinario de los cauces es la municipal.

Tras conocer esta sentencia, el entonces Delegado Territorial de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio mantuvo una reunión con representantes municipales, con concreto con la Concejala Delegada del Área de Obras Públicas y Servicios Urbanos del Ayuntamiento de Almería, quedando “claramente claramente establecido entre ambos que los problemas de vertidos sobre el dominio público hidráulico del citado Barranco del Caballar en suelo no urbanizable serían abordados por la Delegación Territorial de esta Consejería en Almería y los situados sobre suelo urbano serian abordados por los servicios del Ayuntamiento de Almería”.

De acuerdo con ello, correspondía al ayuntamiento la limpieza de los residuos depositados sobre el dominio publico hidráulico del tramo urbano del Barranco del Caballar, así como la adopción de las medidas de vigilancia y defensa para evitar nueva acumulación de residuos y, en su caso, la aparición de problemas higiénico-sanitarios, riesgos hidráulicos de obstrucción y derrame asociados a dicha acumulación.

En cuanto al Ayuntamiento de Almería, en un primer informe nos indicaron que habían solicitado a la empresa concesionaria del servicio de limpieza una valoración económica de los trabajos de limpieza del enclave urbano; posteriormente nos informaron que estaban tramitando el contrato menor para la adecuación y limpieza del barranco del Caballar y Rambla de Belén, con un plazo de ejecución de un mes y, en aquellos momentos, se encontraba en proceso de licitación.

De lo expuesto se deducía que el ayuntamiento estaba adoptando las medidas necesarias para proceder a la limpieza del Barranco del Caballar, por lo que procedimos al archivo del expediente de queja al entender que el problema estaba en vías de solución.