Como Defensor del Menor de Andalucía, esta Institución se dirige a los medios de comunicación social para solicitar que determinadas informaciones referidas a niños, niñas y adolescentes se efectúen con pleno respecto de sus derechos y teniendo en cuenta la singular protección de la que deben ser objeto, ellos y sus familiares.
El tratamiento informativo respecto al juicio por el fallecimiento de un menor en Almería –tragedia con una importante repercusión social a nivel nacional- motiva una llamada de atención para todos los profesionales que están tratando este suceso, para que extremen el rigor y el cuidado informativo ante la memoria de un menor fallecido, sujeto que debiera también estar protegido, así como el de sus progenitores, que pueden ver incrementado el dolor por la terrible pérdida de un hijo con datos no contrastados, rumores, filtraciones o informaciones innecesarias para la cobertura del evento.
Y es que, por encima de un lógico ejercicio de competencia informativa, la inadecuada utilización de la imagen y los demás datos personales de cualquiera de las personas menores relacionadas supone vulnerar el ámbito de sus derechos y motivaría la intervención de las autoridades responsables.
Asimismo, demandamos una protección especial para los progenitores, con quienes mantenemos contacto, y que nos han transmitido que en ocasiones se sienten desamparados y desprotegidos ante algunos medios de comunicación, así como por un inadecuado uso de las redes sociales por parte de algunas personas. Como ellos mismos han denunciado, “desde el principio hemos intentado dar la mejor versión de nosotros mismos en beneficio de aligerar la carga y el sufrimiento a los demás, pero tenemos miedo a que el juicio y el enorme despliegue mediático no proceda de manera justa con la protección de la imagen de Gabriel y su familia”.
En concreto, la familia solicita a los medios de comunicación, y compartimos, que se eviten informaciones relativas a informes forenses que puedan dañar la imagen del pequeño y causar un dolor enorme a sus seres queridos; que los datos que afectan a su situación personal, contados para el desarrollo del juicio, queden fuera de dominio público; y un uso responsable y respetuoso de la imagen de Gabriel y la familia.
La Defensoría quiere agradecer la colaboración de todos los profesionales de los medios de comunicación —que han prestado un ejercicio de implicación y colaboración ejemplares con la familia de la víctima— para que el tratamiento informativo sea a su vez un ejemplo de rigor y respeto a las normas que protegen los derechos de estos menores.
1 Comentarios
Gracias por este pacto. Sorprende que algunos medios de comunicación o redes sociales hagan oídos sordos. A nadie gustaría que se publicara en los periódicos, TV o redes sociales detalles tan íntimos como éstos de un familiar o amigo/a, y menos aún si se trata de un menor.
Esperemos que esto también lo entiendan todos/as los que estén en esa sala, que los profesionales sigan su código deontológico, y el jurado popular este pacto ético.
Pero también el público tenemos la responsabilidad de no clickar en noticias sobre el tema y no compartirlas.